domingo, 4 de julio de 2010

Bashar al Assad y Cristina Fernández de Kirchner

La Presidente Cristina Fernández de Kirchner, ha recibido al Dictador sirio Bashar al Assad y como era de esperar, la Presidente de Argentina, no dudó en hacer sentir lo más cómodo posible al dictador sirio, pues sucede que la Sra Cristina Fernández de Kirchner, se siente muy a gusto en compañía de dictadores y muy especialmente, si estos dictadores son como Assad, es decir, socialistas.


Bashar al Assad, ha heredado de su padre el control del único partido político de Siria, el Partido del Renacimiento Árabe Socialista (BAAS) y si la Sra. Cristina Kirchner, rechazara en los hechos a las dictaduras, tal y como lo señala en muchos de sus discursos y creyera honestamente lo que en el mismo discurso que le dedicó al tirano sirio, sobre que el respeto a los Derechos Humanos es una política de Estado para la Argentina y que toda nación que pisotee los mismos insulta al Pueblo Argentino, si ella, realmente creyera lo que dice, desde ya, no hubiese siquiera aceptado recibir al dictador sirio, ni tampoco antes hubiese ido a visitar al dictador Khadafi de Libia, ni a tantos otros dictadores cuyas compañías, evidentemente agradan a la Sra. Kirchner.

La Presidente en su discurso, ha señalado cuál es la razón por la cual, no duda en vender los principios de respeto por los Derechos Humanos que tanto declama y ésta es sencillamente, el comercio de la Yerba Mate, ya que Siria es el país que mayores ganancias reporta a la Argentina en materia de exportación de Yerba Mate.

He aquí un dato que no debería ignorarse, pues las exportaciones totales de la Argentina a Siria, son de 256,33 millones de dólares en tanto que las exportaciones argentinas a Israel son de 150,3 millones de dólares, la realidad también indica que la balanza comercial entre Siria y la Argentina, es muy claramente favorable a la Argentina por 255,79 millones de dólares en tanto que la balanza comercial argentino israelí, si bien es favorable a la Argentina también, lo ha sido por mucho menor margen de ganancias para la Argentina, ya que la misma ha rondado los 25 millones de dólares favorables a la Argentina. Evidentemente, a la Presidente Cristina Kirchner, sus percepciones del comercio internacional de la Argentina, le importan más que sus declamaciones en pos del respeto a los derechos humanos.

Pero, teniendo en cuenta que ambos países, dejan un saldo favorable a la Argentina, en materia de balanza comercial y que Israel a diferencia de Siria, le aporta a la Argentina una importante fuente de tecnología de punta, cabe preguntarse si, en pos de caerle bien al dictador sirio, la Sra Kirchner debía mentir respecto de Israel, cabe preguntarse si el origen de esas mentiras han sido su ignorancia sobre la evolución del conflicto árabe israelí, cabe preguntarse si era necesario que opinara sobre Israel, para resaltar las relaciones bilaterales con Siria y finalmente cabe preguntarse si su actitud no ha sido fruto de un larvado antisemitismo que, se deja ver en los apoyos que el matrimonio Kirchner ha dado oportunamente al sí indudablemente antisemita, dirigente piquetero Luis D’Elía.

El discurso de la Presidente, no puede ser calificado sino de soez, ya que el mismo, contuvo fuertes acusaciones contra Israel, acusaciones que, a estas alturas, cualquier persona medianamente informada sobre el conflicto árabe israelí, sabe que son mentiras propagandísticas.

Por caso, en su discurso, la Presidente no dudó en comparar la situación de las Alturas del Golan con Malvinas, ella olvida intencionadamente, que a diferencia de Argentina con Malvinas, Siria pierde las Alturas del Golan en una guerra iniciada por la misma Siria, contra Israel. Ella intencionadamente decide ignorar que Israel, a diferencia de la Gran Bretaña con Malvinas, no se hace con las Alturas del Golan por mera ambición territorial, sino que anexiona dicho territorio como respuesta a, primero, los permanentes disparos que los sirios realizaban desde allí contra la población civil de Israel y segundo, tras la guerra de exterminio iniciada por Siria contra Israel.

Tal vez, sea necesario aconsejarle a la Sra Kirchner, que se informe sobre la Historia de la Argentina, antes de que se la ponga a comparar con la Historia del conflicto árabe israelí, tal vez, sería bueno sugerirle que busque a un historiador de verdad para que le informe.

Pero, la Sra. Kirchner, no se quedó satisfecha con éstos planteos y no dudó en recurrir a otras afirmaciones que no sólo demostraron su mala intencionalidad, en torno al conflicto árabe israelí, sino también y esto debería preocupar aun más a los argentinos, sus verdaderas visiones de lo que debe ser la política, ya que con ignorancia simulada señaló que el comercio Sur – Sur debe ser prioritario en las relaciones comerciales, lo que implica, un par de preguntas ¿Sabrá que Siria está en el Hemisferio Norte? ¿Sabrá que Sira está al Norte de Israel? Si ella quisiera priorizar el comercio Sur – Sur como señala, debería considerar que Israel es más Sur que Siria.

Desde ya, no vamos a pretender que esta afirmación ignorante de la Sra. Kirchner es, literalmente, Sur – Sur. Ella lo que ha querido decir, es que los gobiernos que desprecian la Libertad Individual, que desprecian la Libertad de Expresión, que desprecian la Propiedad Privada y la Libertad de Comercio, deben estrechar sus vínculos, ya que si fuera una cuestión de incrementar el comercio Sur – Sur, la veríamos entrevistándose con autoridades de países como Australia y Nueva Zelanda, más que de Libia o Siria. Ella sabe que ciertos niveles de sinceridad, pueden restarle votos aun en el sistema electoral neofascista de la Argentina, por ello prefiere la fórmula Sur – Sur, más que la más honesta Tiranía – Tiranía, ya que la formula por ella empleada, le permite esconder del público argentino, su amor por los regímenes genocidas y totalitarios como el de Bashar al Assad.

Lamentablemente, la comunidad judía de la Argentina, ha tenido que presenciar cómo uno de sus miembros, por amor a las ventajas y el oportunismo político, la ha traicionado, pues ¿de qué otra forma se puede calificar el silencio de Timerman ante tantas mentiras contra el Estado de Israel? Que es el único garante de supervivencia que en el mundo tiene su propio Pueblo. ¿No pudo ver antes el discurso? ¿No pudo haberle señalado que no existen fronteras internacionalmente reconocidas de Israel más allá de las que Israel ha fijado con El Líbano; Egipto y en parte con Jordania? ¿No ha sabido señalarle el terrible error que cometió la presidente al tratar de asociar a Israel con un Estado que no cumple con las Resoluciones de la ONU? ¿No pudo explicarle tampoco que en materia de política Internacional nunca ha existido el multilateralismo que la Presidente, ahora sí en su genuina ignorancia pretende reconstruir? El silencio de Timerman es digno de preocupación y debería serlo de repulsa también.

También, la Presidente, debería preocuparse por conocer bien al hombre al que tantos apoyos quiso darle en su breve discurso, pues ese hombre, es el principal sospechoso de la muerte del mandatario libanés Rafiq El Hariri, hombre al que supo mandar ha asesinar cuando quiso liberar al Líbano de la tutela de Siria. Aunque, tal vez, sean los argentinos los que más deban preocuparse de una Presidente y un ex mandatario que no temen codearse con asesinos y dictadores.