domingo, 12 de febrero de 2017

El reacomodamiento gracias a Trump

El golpe de Estado en Siria que no fue: el hermano de Bashar al Assad quiso derrocarlo con ayuda de Irán

Las noticias que llegan de Siria nos dicen puntualmente que Maher Al Assad, el hermano menor del genocida Bashar Al Assad, ha intentado un Golpe de Estado, el cual por lo que se puede ver, de ser cierto el intento, ha fracasado.

La noticia es positiva, pues deja en el poder al genocida de Bashar Al Assad que, no por ser un genocida no es necesariamente peor que su propio hermano o que las hordas del Estado Islmámico, en cuánto a la criminalidad de los actores que juegan en la guerra civil siria, ninguno es trigo limpio, los únicos que a mi entender merecen verdadero respeto por el momento son los kurdos que luchan por su propia independencia, el resto de los participantes musulmanes de esta tragedia, son sencillamente malos, son simplemente criminales, pero en esa maraña de criminalidad hay quienes pueden ser más convenientes que otros para los intereses de occidente en general y de Israel en particular y en ese sentido Bashar Al Assad es en última instancia no sólo el viejo enemigo predecible, sino que ahora es el viejo enemigo predecible controlado por Rusia, una Rusia que se está entendiendo con el nuevo Presidente de los Estados Unidos que habla claramente, señala sus intereses sin ambigüedades y lo convierten en un interlocutor válido para Rusia, cuyo Presidente también tiene sus objetivos claros y conoce el escenario en el que se mueve, escenario plagado de mediocres dirigentes europeos que no sólo no entienden lo que sucede en Oriente Medio, sino que pese a las brutales evidencias, no entienden lo que está sucediendo fronteras adentro de Europa y por ello, no sin una gran dosis de estulticia, critican las políticas migratorias de Donald Trump.

Las posibilidades de constituir una alianza entre Rusia, Estados Unidos e Israel, son buenas con la llegada de Trump al poder, y una alianza de esas características es la que se necesita para ponerle fin a la volatibilidad incontrolable en que hoy se ha transformado Oriente Medio, esto no implicará solucionar todos los conflictos, ello estimo llevará generaciones, pero sí podrá llevar a un cause controlable el grado de conflictividad, reducirá los jugadores bélicos sobre el terreno y asegurará a Israel su existencia por varias décadas.

Para que el conflicto llegue realmente a su fin se van a requerir de otros elementos, entre ellos el reemplazo total del petróleo en los medios de transporte y generación de energía, un cambio de mentalidad de la sociedad europea en particular y mundial en general donde quede claro que no es posible ser tolerante con los intolerantes, si los países donde es mayoría el Islam no se respetan los derechos de quienes no son musulmanes, se deben aplicar esas mismas políticas con los musulmanes en los países donde éstos no sólo no son mayoritarios, sino que además reciben financiamiento para sus instituciones comunitarias por parte de regímenes como los de Irán; Qatar y Arabia Saudita, que son hoy día los más importantes enemigos de la civilización liberal toda vez que son quienes financian a los movimientos islámicos que están cometiendo atentados en todo el mundo.

sábado, 11 de febrero de 2017

Hipocresía contra Trump



Obama en 2011 firma una orden ejecutiva que suspendía por 6 meses el ingreso de irakíes a los Estados Unidos y era el negrito amoroso ganador del premio Nobel de la Paz.

Trump asume una medida similar que suspende el ingreso de ciudadanos de países que tienen antecedentes de exportar terroristas y a la prensa intelectualoide le da un soponsio.

¿Y en Argentina nadie recuerda cómo desaparecieron varios estudiantes iraníes de la Universidad de La Plata tras el atentado a la AMIA?


¿Y los europeos no toman nota que en Noruega y Suecia reaparecieron las violaciones a mujeres las cuales son realizadas en su totalidad por musulmanes provenientes en su mayor parte de los países señalados en la orden ejecutiva?

¿Y Ángela Merkel no toma nota de la violencia desatada por refugiados de esos países que en la Noche Buena de 2016 violaron a muchas mujeres en Alemania? eso sin mencionar otros incidentes terroristas cometidos no sólo contra alemanes sino también contra refugiados de esos países que no son musulmanes.

Francamente hay cierto grado de infantilismo que es difícil de comprender. Aceptar y ayudar a extranjeros refugiados que quieren trabajar y vivir en Paz es bueno, pero eso no puede hacerse sin controles que permitan detectar y detener a terroristas que planean llevar su espiral de odio religioso a los países que ayudan a los que escapan de esa violencia religiosa musulmana. Y el ayudar tampoco puede hacerse a base de poner en peligro la vida de los ciudadanos del país anfitrión.

Muros



Muro que separa a protestantes de católicos en Irlanda del Norte; Muro que separa a las españolas Ceuta y Melilla de Marruecos; Muro que separa a egipcios de palestinos de Gaza; Muro que separa israelíes de palestinos; Muro que separa a Argentinos (Posadas) de Paraguayos (Encarnación); Muro que separa a Corea del Norte de Corea del Sur; Muro entre Marruecos y el Sahara occidental; Muro construido por México en 2014 para evitar la inmigración ilegal desde Guatemala, Muro de Pakistán con la India y éste último país planea incrementar la eficacia del mismo; Muro entre Arabia Saudita e Irak en la región de Anbar; Muro construido por Naciones Unidas para separar a Kuwait de Irak; Muro en Chipre para separar a griegos de turcos; Muro de Uzbekistán con Tajikistán y Afganistán; Muro entre Sudáfrica y Zimbawe; Muro entre Sudáfrica y Mozambique; Muro entre Bulgaria y Turquía; Muro entre Grecia y Turquía; etc etc y a todos sólo les jode que Trump construya un muro con México

El twiter de Bibi en apoyo a Trump



No son pocos que en la diáspora judía latinoamericana se han enojado con Bibi por su apoyo explícito a Trump en relación al Muro que quiere construir para intentar limitar la inmigración ilegal a los EEUU, en el trámite se olvidan que dicho Muro ya existe en parte y que el mismo fue iniciado por el Presidente Bill Clinton (Demócrata) y continuado por el republicano George Bush (h) y por el demócrata Barack Obama que es el niño mimado de la prensa intelectualoide. Recordado este punto no menor, no es posible olvidar que México ha votado contra Israel en las Naciones Unidas, si ese es el comportamiento de naciones amigas de Israel, comprenderemos luego el comportamiento de las naciones enemigas.

Cierto es que la última resolución del Consejo de Seguridad contra Israel fue fogoneada por los Estados Unidos, pero no es menos cierto que el Congreso de los Estados Unidos estuvo en completo desacuerdo con el accionar de la administración Obama, por lo tanto, la administración Obama se mostró contraria a Israel a diferencia del Congreso de los Estados Unidos, esto es bueno tenerlo en cuenta a la hora de considerar la amistad entre los Estados Unidos e Israel, pues es por demás claro que esa amistad es indudablemente más sólida que la amistad que dicen tener con Israel otros gobiernos, el de México incluido.

Trump; Putin y Netanyahu, dejadas de lado sus personalidades, e intereses internacionales tal vez sean los tres políticos que más claramente exponen sus políticas, dejando de lado el lenguaje políticamente correcto que tanto favorece a los intereses de los terroristas y de los gobiernos más criminales que hoy día existen y que se ven favorecidos por las políticas hipócritas cuando no simplemente cínicas de la Unión Europea.

Entre Rusia por un lado y Estados Unidos e Israel por el otro existen décadas de conflictos e intereses contrapuestos y eso no va a cambiar de la noche a la mañana, pero si sus líderes políticos demarcan sus intereses con claridad, la posibilidad de entendimiento y beneficio mutuo es indudable. Por ejemplo, es conocido el apoyo de Rusia al régimen criminal de Bashar el Assad, quien es a su vez aliado del régimen teocrático terrorista de Irán y del grupo terrorista libanés de Hizballá pero ello no impidió la coordinación entre Israel y Rusia para que cada uno pueda defender sus intereses sin dañarse mutuamente, por ello las fuerzas israelíes han podido seguir atacando y destruyendo equipo militar ruso destinado por Siria a Hizballah sin ser molestados por las fuerzas rusas y fuerzas rusas han podido volar por el espacio aéreo israelí para atacar a enemigos árabes del gobierno sirio. Israel sabe que a Rusia le interesa su comercio de armas con Siria y más aún la posibilidad de mantener una base militar en el puerto de Latakia por su lado Rusia sabe que a Israel no le interesa expulsar a los rusos de Siria, sino que le interesa evitar que Hizballah se haga de armas que puedan ser utilizadas contra Israel. El entendimiento claramente es posible si se dejan en claro los objetivos de cada uno y en ese camino se enfoca la administración Trump.

Ahora bien, Israel necesita y más aún después de la Resolución 2334, que los Estados Unidos trasladen su embajada a Jerusalem, con lo cual echaría por tierra en gran medida a la resolución 2334 y llevaría posiblemente a otros países a trasladar su embajada a Jerusalem, por ejemplo Guatemala se ve como uno de los países que podrían seguir ese camino si así lo hace Estados Unidos y no serían hemos de suponer esos los únicos casos, con ello Israel se asegura el reconocimiento internacional de su verdadera Capital.

Si el hecho de pasar factura a México por su voto en Naciones Unidas desconociendo el vínculo histórico entre el Pueblo Judío y el Kotel (Muro de los Lamentos) y la necesidad de presionar a la administración Trump para que haga efectiva su promesa de campaña no son razones de peso para un apoyo explícito de Bibi a la política de Trump, desconozco cómo se puede lograr el objetivo deseado manteniendo la tibieza del lenguaje políticamente correcto. Un lenguaje que sólo condena a Trump por querer continuar lo que han hecho sus últimos predecesores y ha hecho el mismo presidente de México con su vecino guatemalteco, un lenguaje que condena a Trump por sus palabras y omite el considerar que más allá de las palabras están las acciones concretas y en concreto Trump ha establecido que el Muro lo van a pagar los ciudadanos estadounidenses mediante el pago de una tasa impositiva de hasta el 20% sobre productos importados desde México. Claramente esos productos no pueden verse mortalmente afectados por dicho impuesto ya que si así sucediera pasaría algo que Trump no quiere y es que no habría dinero, que pudiera en su lenguaje disfrazar de mexicano, para financiar el Muro. Finalmente a todos parece pasárseles por alto que Peña Nieto ya ha hablado con Trump por este tema y ambos acordaron en no hablarlo más en público, una necesidad lógica que los libera de la presión interna de sus modos de hacer política y de la presión de la opinión pública de cada país, ambos van a hablar y llegarán a un acuerdo pues la distancia fue grande más por la pirotecnia verbal que por las medidas concretas que cada uno estaba dispuesto a aplicar.

Muchos por su lado señalan que Bibi falta a la verdad en su apoyo a la construcción del Muro cuando señala que Israel ha construido uno a lo largo de su frontera con Egipto y eso ha eliminado prácticamente el ingreso de inmigrantes ilegales, aducen que el verdadero objetivo de tal muro no era detener inmigrantes ilegales como manifiesta Bibi, sino impedir el ingreso de terroristas y pregunto ¿hay alguna diferencia? Pues no la hay, pues no hay modo de conocer las intenciones de una persona, fortalecer la frontera para impedir el ingreso de terroristas y delincuentes necesariamente va a afectar también al que decida ingresar de forma ilegal aunque sus acciones, posteriormente de violar las leyes de su país de destino, sean honestas, la única forma de detener el ingreso de delincuentes y terroristas es deteniendo el ingreso ilegal de cualquier persona, no hay otra forma y los Estados Unidos son un claro objetivo del terrorismo internacional, por lo que no puede ni debe darse el lujo de permitir que su frontera sea un colador. Aunque desagradable el gobierno de Trump debe seguir construyendo el Muro con México, por no sólo las mismas razones por las que México lo construyó con Guatemala, sino también para defenderse de la amenaza terrorista.

En este caso Netanyahu actuó como debía, con inteligencia, sabe que necesita presionar a Trump que se ufana de apoyar a quienes son verdaderos amigos de los Estados Unidos, la acción de Bibi no afecta realmente a México y el gobierno mexicano lo sabe bien y si no lo sabe los mexicanos están en más problemas de los que se imaginan.

Retrato de un antisemita



Si un hombre atribuye total o parcialmente las desgracias de su nación o su propia desgracia a la presencia en el país de una comunidad judía, si se propone remediarlo privando a los judíos de algunos de sus derechos, apartándolos de algunas funciones económicas y sociales, expulsándolos del territorio o exterminándolos a todos, se dice que tiene opiniones antisemitas.

Esta palabra opinión hace pensar. Se puede tener una opinión sobre casi cualquier cosa. El antisemita, en nombre de la democracia, en nombre de la libertad de opinión, reclama el derecho de predicar dondequiera su cruzada antijudía. Me niego a llamar opinión a una doctrina que apunta expresamente a determinadas personas y que se propone suprimirles sus derechos o a exterminarlas. El antisemitismo no entra en la categoría de pensamientos protegidos por el derecho de libre opinión. El antisemitismo se diferencia mucho de otros pensamientos normales.

Es, antes que nada, una pasión. El antisemita siente repulsión hacia el judío como se siente repulsión, entre otras comunidades, hacia el negro o el chino. Y esta repulsión nace del espíritu, es un compromiso del alma, no de la experiencia; es un compromiso tan profundo y total que se extiende a lo fisiológico, como en el caso de la histeria. La indignación del antisemita proviene de haber asumido de antemano un concepto negativo del ser judío, de su naturaleza y de su papel social. No es su propia experiencia la que engendra su visión negativa del semita; es el prejuicio el que exacerba su sentimiento. Si el judío no existiera, el antisemita lo inventaría.

Ningún dato histórico puede inculcar en el antisemita su antisemitismo. En Francia, la comunidad judía fue oprimida hasta 1789, después participó como pudo en la vida de la nación aprovechando la libre competencia para ocupar espacios, ni más ni menos que los otros franceses; no cometió crimen ni traición contra Francia. El antisemitismo expresa una postura de odio y de rabia no justificado por los hechos. Otros hombres buscan certezas gimiendo, saben que el razonamiento es únicamente probable.

El antisemitismo es una certeza, una fe. La frase “odio a los judíos” es de las que se pronuncian en grupo; al pronunciarla se adhiere a una tradición y a una comunidad, la de los mediocres. Para el antisemita la inteligencia es judía; puede, pues, despreciarla con toda tranquilidad como a otras virtudes judías.

El antisemita huye de la responsabilidad como huye de su propia conciencia, y escoge para sí la permanencia de la piedra. Escoge lo irremediable por temor a la libertad, la mediocridad por temor a la soledad. Necesita la existencia del judío pues, sin el judío, ¿ante quién sería superior? Interroguemos a uno de esos jóvenes turbulentos que se juntan para golpear a un judío en una calle desierta: nos dirá que desea un poder fuerte que lo exima de la responsabilidad de pensar por sí mismo; que adora el orden, pero un orden sin responsabilidad, desea una libertad al revés. La libertad autentica asume sus responsabilidades y la del antisemita proviene de que se sustrae de todas las suyas. Enemigo de los judíos, el antisemita necesita de ellos; antidemócrata, el antisemita florece muy bien en las democracias.

El antisemita teme descubrir que el mundo está mal hecho; en ese caso sería necesario inventar, modificar, y el hombre sería dueño de su propio destino, dotado de una responsabilidad angustiosa e infinita. Por eso concentra en los judeos todo el mal del universo.

El antisemita es un maniqueo: explica la marcha del mundo por una pelea entre el bien y el mal y pone el acento en la destrucción; el bien consiste, ante todo, en destruir al mal. El bien ya está dado, no hay que buscarlo en medio de la angustia, inventarlo, discutirlo pacientemente cuando se lo ha encontrado, probarlo en la acción, verificar sus consecuencias y hacerse finalmente responsable de la elección moral que se ha hecho. El antisemita se ha decidido por el mal para no tener que decidir sobre el bien. Como buscador del mal, el antisemita se lava las manos en la mugre.

Nada comprenderíamos del antisemitismo si no recordásemos que el judío, objeto de tanta execración, es perfectamente inocente y, me atrevo a decir, inofensivo. Es un ser que, mal preparado para la violencia, ni siquiera logra defenderse. Esta debilidad individual del judío, que lo entrega de pies y manos a los pogromos, no la ignora el antisemita y se deleita anticipadamente con ello. El atractivo sádico hacia los judíos es tan fuerte que le permite pegarles y torturarlos impunemente; a lo sumo la víctima acudirá a las leyes, pero las leyes son suaves. Destructor por oficio, sádico de corazón puro, el antisemita es, en el fondo de su corazón, un criminal. Lo que desea, lo que prepara, es la muerte del judío.

Pero aún en su propósito criminal ha rehuido sus responsabilidades. Se sabe malo, pero como supone hacer el mal por el bien, se considera una especie de malo sagrado. Del otro lado del antisemita está el demócrata que proclama la igualdad de todos los seres humanos, no conoce al judío, ni al árabe ni al negro. Conoce únicamente al hombre, en todo tiempo y lugar igual a sí mismo. Por eso el antisemita y el demócrata siguen hablando sin entenderse nunca, ni advierten que no se refieren a las mismas cosas. Para el antisemita la avaricia judía no es la misma que la avaricia cristiana. En cambio para el demócrata la avaricia es una sola: se es o no se es avaro. De ello se deduce que su defensa del judío salva al judío como hombre pero lo aniquila como judío. Frente al ataque apasionado del antisemita y la tibia defensa del demócrata, parece que al judío sólo le queda elegir la salsa con la que habrán de comérselo.

El antisemita es un hombre que tiene miedo. No de los judíos, por cierto: de sí mismo, de su conciencia, de su libertad, de sus instintos, de sus responsabilidades, de la soledad, del cambio, de la sociedad y del mundo; miedo de todo, menos de los judíos. Es un cobarde que no quiere enfrentar su cobardía; un asesino que reprime su tendencia al homicidio sin poder refrenarla y que, sin embargo, no se atreve a matar sino indirectamente o en el anonimato de una multitud. Elige la impenetrabilidad de la piedra, la irresponsabilidad del soldado que obedece órdenes superiores (y no tiene un superior). El judío, para él, es un pretexto; en otros países perseguirá al negro, en otros, al amarillo. El antisemitismo, en resumen, es el miedo ante la condición humana. El antisemita es el hombre que quiere ser peñasco implacable, torrente furioso, rayo devastador; todo menos un hombre.

Jean Paul Sartre

Turquía Asesina



No es una foto de alguno de los 1,5 millones de niños judíos asesinados por los nazis. No es la imagen de algunos de los miles de niños ucranianos asesinados por medio del hambre por Stálin. Son niños armenios, son unos de los miles de niños armenios asesinados por el Gobierno turco que al día de hoy siguen sin reconocer el genocidio que llevaron adelante. Genocidio que se llevó la vida de 1,5 millones de armenios, pero que luego se llevará la vida de medio millón de griegos y medio millón de asirios. Esos dos millones y medio de personas asesinadas por los turcos, cometieron el terrible delito de ser cristianos en un país de mayoría musulmana.
Turquía Asesina. Turquía Asesina clama la colectividad armenia. Y tienen Razón. Turquía Asesina al día de hoy a todas esas personas al negarles Justicia. Turquía Asesina al día de hoy al intentar negarles incluso el recuerdo, prueba de ello, es que el Gobierno de Turquía, ha decidido retrasar la tradicional conmemoración de la Batalla de Gallípoli que hasta este año conmemoraban los turcos cada 18 de marzo, fecha en la que en 1915 las tropas aliadas habían fracasado en su primer intento de desembarco.
El Gobierno Turco, sin embargo este año decide postergar la fecha y hacer una celebración de carácter Internacional y decide conmemorar los 100 años de aquel trágico suceso, el 25 de abril de 2015. Tengamos en cuenta que el día Internacional de Conmemoración del Genocidio Armenio es el 24 de abril, pues en esa fecha pero de 1915 se da inicio a la matanza indiscriminada de civiles armenios. El Gobierno de Armenia había planeado y de hecho había cursado invitaciones a diferentes líderes mundiales para conmemorar los 100 años del inicio de este Genocidio Armenio, que fue la antesala de la Shoá, es decir del Genocidio Judío.
El Gobierno de Turquía, ha decidido hacer valer su peso en Política Internacional, como miembro de la OTAN, como socio de Europa, como pieza importante en el tablero de Oriente Medio y el Mediterráneo Oriental, frente a un recién nacido Estado Armenio y ha decidido usar ese peso con el objetivo claro de tapar los intentos de Armenia para que se reconozca internacionalmente el Genocidio Armenio en toda su gravedad e importancia.
Turquía está empeñada en mostrar otra imagen de ella misma, pero no es una imagen donde se muestra un cambio basado en la honestidad y la verdad, sino un cambio de aspecto sólo superficial que reafirma, que de hecho Justifica, la matanza de Hombres, Mujeres y Niños indefensos a manos de las tropas del Imperio Otomano. El cambio de las fechas, es tal vez el ejemplo más evidente, el más sutil sin embargo marcha de la mano de la novela “Las Mil y Una Noches” donde el Estado Turco realiza actividades pagadas por él mismo para llevar a periodistas del espectáculo a conocer Turquía y mostrarla como una sociedad plural, claro que las palabras de Erdogan que considera que el lugar de la mujer es en la Casa atendiendo a los hijos y obedeciendo al esposo no serán traducidas, claro que las palabras de Erdogan donde afirma que está mal hablar de Islam Moderado, pues no existe y sólo hay Un Islam, no serán traducidas, claro que las palabras de Erdogan que afirma que Colón no es el que descubre América sino que sus descubridores son los musulmanes en el año 1178 serán minimizadas, nadie prestará atención a la negativa turca de ayudar a los sitiados kurdos en Koban que han luchado heroicamente contra los musulmanes del ISIS, nadie atenderá los habituales bombardeos contra poblaciones kurdas dentro de la Turquía de Hoy, ni se prestará atención al asesinato de cristianos, ni a las calificaciones de monos y cerdos para los judíos, en la actual Turquía. No. Esos periodistas cuyos viajes son pagados por el Estado Turco, sólo pretenderán ver a la más amable Turquía que dio a luz a personajes como Onur y Sherezade pero que tras esa superficialidad mediática esconde un Hecho irrefutable a mi entender: TURQUÍA ASESINA.

El amor a Cristina Kirchner, el amor a la Jefa




Entre el 16 de abril y el 2 de mayo de 1945 se desarrolla la batalla de Berlín, las hordas nazis están acorraladas y Hitler se esconde en su bunker.


Las fuerzas soviéticas disponen de 2.300.000 soldados más 200.000 soldados polacos incorporados recientemente, es decir 2,5 millones de soldados soviéticos rodean Berlín, disponen ellos además de 6.250 tanques, 41.600 cañones de todo tipo y 7.500 aviones. Con todo ese peso, los soviéticos se disponen a aplastar la resistencia alemana en Berlín.


Atrás habían quedado las aplastantes derrotas alemanas de Stalingrado (23 de agosto de 1942 al 2 de febrero de 1943) y Kursk. Los alemanes no han hecho otra cosa más que retroceder desde la derrota de Stalingrado y cada contraofensiva alemana fue repelida y finalmente aplastada por los soviéticos, pero con esos antecedentes encima, y con las fuerzas soviéticas rodeando Berlín, los alemanes se disponen a resistir.


A los 2,5 millones de soldados soviéticos se oponen 90.000 soldados alemanes, de los cuales 18.500 tenían más de 60 años y otros 2.300 eran niños de entre 13 y 16 años. Todos los soldados soviéticos tenían armas en tanto que los alemanes sólo contaban con 42.000 fusiles, 2.000 ametralladoras.


A los 6.250 tanques soviéticos, se oponían sólo 30 tanques alemanes y a los 41.600 cañones tan sólo oponían 100 morteros.


Sin defensas antiaéreas significativas, el 20 de abril aviones bombarderos de EEUU e Inglaterra se unen a la batalla para desearle feliz cumpleaños a Hitler. El bombardeo es tan duro como efectivo e implacable el avance soviético.


Los alemanes están acabados desde cualquier perspectiva lógica que se quiera observar la batalla, sin embargo ellos seguían luchando y resistiendo pues estaban convencidos de que su victoria estaba cerca, estaban seguros que su líder sólo había llevado hacia una trampa a los soviéticos para aplastarlos de un sólo y definitivo golpe con sus armas secretas.


Hitler por su lado entregaba medallas e insistía en la proximidad de la victoria.


Ahora bien, si los alemanes creían que ante esa realidad estaban cerca de ganar la guerra ¿Cómo es que te sorprende que los idiotas de los kirchneristas sigan apoyando a su jefa? no olvides que comparten con los nazis la misma patología de amar a su líder por sobre toda evidencia, lógica y razón. No vale la pena intentar razonar con los kirchneristas como no valían la pena los panfletos de los soviéticos invitando a los alemanes a rendirse y evitar la última gran carnicería provocada por los nazis. No importa que trates de razonar con un kirchnerista, es claro que son personas incapaces para razonar con un mínimo de lógica, siguen llamando modelo exitoso a ese que aplicaron durante 25 años en Santa Cruz y hoy la Provincia, por ellos gobernada de manera continua está en quiebra.


Nada que dialogar con ellos, son seres carentes de la capacidad de razonar, sólo son como meras ovejas siguiendo a su pastor, siervos fascistas al servicio de la jefa.