sábado, 11 de febrero de 2017

El amor a Cristina Kirchner, el amor a la Jefa




Entre el 16 de abril y el 2 de mayo de 1945 se desarrolla la batalla de Berlín, las hordas nazis están acorraladas y Hitler se esconde en su bunker.


Las fuerzas soviéticas disponen de 2.300.000 soldados más 200.000 soldados polacos incorporados recientemente, es decir 2,5 millones de soldados soviéticos rodean Berlín, disponen ellos además de 6.250 tanques, 41.600 cañones de todo tipo y 7.500 aviones. Con todo ese peso, los soviéticos se disponen a aplastar la resistencia alemana en Berlín.


Atrás habían quedado las aplastantes derrotas alemanas de Stalingrado (23 de agosto de 1942 al 2 de febrero de 1943) y Kursk. Los alemanes no han hecho otra cosa más que retroceder desde la derrota de Stalingrado y cada contraofensiva alemana fue repelida y finalmente aplastada por los soviéticos, pero con esos antecedentes encima, y con las fuerzas soviéticas rodeando Berlín, los alemanes se disponen a resistir.


A los 2,5 millones de soldados soviéticos se oponen 90.000 soldados alemanes, de los cuales 18.500 tenían más de 60 años y otros 2.300 eran niños de entre 13 y 16 años. Todos los soldados soviéticos tenían armas en tanto que los alemanes sólo contaban con 42.000 fusiles, 2.000 ametralladoras.


A los 6.250 tanques soviéticos, se oponían sólo 30 tanques alemanes y a los 41.600 cañones tan sólo oponían 100 morteros.


Sin defensas antiaéreas significativas, el 20 de abril aviones bombarderos de EEUU e Inglaterra se unen a la batalla para desearle feliz cumpleaños a Hitler. El bombardeo es tan duro como efectivo e implacable el avance soviético.


Los alemanes están acabados desde cualquier perspectiva lógica que se quiera observar la batalla, sin embargo ellos seguían luchando y resistiendo pues estaban convencidos de que su victoria estaba cerca, estaban seguros que su líder sólo había llevado hacia una trampa a los soviéticos para aplastarlos de un sólo y definitivo golpe con sus armas secretas.


Hitler por su lado entregaba medallas e insistía en la proximidad de la victoria.


Ahora bien, si los alemanes creían que ante esa realidad estaban cerca de ganar la guerra ¿Cómo es que te sorprende que los idiotas de los kirchneristas sigan apoyando a su jefa? no olvides que comparten con los nazis la misma patología de amar a su líder por sobre toda evidencia, lógica y razón. No vale la pena intentar razonar con los kirchneristas como no valían la pena los panfletos de los soviéticos invitando a los alemanes a rendirse y evitar la última gran carnicería provocada por los nazis. No importa que trates de razonar con un kirchnerista, es claro que son personas incapaces para razonar con un mínimo de lógica, siguen llamando modelo exitoso a ese que aplicaron durante 25 años en Santa Cruz y hoy la Provincia, por ellos gobernada de manera continua está en quiebra.


Nada que dialogar con ellos, son seres carentes de la capacidad de razonar, sólo son como meras ovejas siguiendo a su pastor, siervos fascistas al servicio de la jefa.

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